La Avenida Diagonal de Barcelona, una de las arterias más icónicas de la ciudad, ha conocido una notable transformación desde su concepción. Proyectada entre 1860 y 1884 por el ingeniero Ildefons Cerdà, esta avenida ha sido testigo de los cambios urbanos y políticos que han moldeado la ciudad que conocemos en la actualidad.
El ingeniero Ildefons Cerdà fue el encargado de planificar la expansión de Barcelona a mediados del siglo XIX, en un momento en que la ciudad necesitaba urgentemente superar las limitaciones de su casco antiguo. El Plan Cerdà, aprobado en 1859, proponía una expansión organizada y moderna, caracterizada por su innovador diseño en cuadrícula. Este plan incluía amplias calles y avenidas que mejoraban la circulación y ventilación de la ciudad, factores clave para mejorar la calidad de vida urbana.
La Diagonal ofrecía una nueva perspectiva en el diseño urbano de la época, rompiendo con el trazado ortogonal del Eixample y proporcionando una vía rápida y amplia que facilitaba el transporte y el comercio.
La Diagonal comenzó como un paseo bordeado por campos y palacetes de veraneo de la alta sociedad barcelonesa. A medida que la ciudad fue creciendo, la Diagonal se convirtió en un eje vital para la expansión urbana, con el desarrollo de numerosos edificios emblemáticos a lo largo de su recorrido, desde viviendas residenciales hasta imponentes oficinas y centros comerciales.
Uno de los hitos más significativos en la transformación de la Diagonal fue la urbanización intensiva que experimentó durante el siglo XX. La avenida se modernizó con la construcción de infraestructuras como el tranvía, que fue introducido a principios del siglo XX. También se llevaron a cabo grandes proyectos como el Edificio Trade, diseñado por el arquitecto Josep Antoni Coderch, y, casi ya en el XXI, la Torre Agbar, un símbolo de la arquitectura contemporánea de la ciudad.
Los nombres que bautizaron a la neurálgica avenida
El primer tramo de la avenida, abierto entre el paseo de Gràcia y Pau Claris, recibió el nombre de Argüelles, aunque poco después se rebautizó como originalmente estaba pensado: Gran Vía Diagonal, nombre que mantuvo desde 1860 a 1874, hasta que recuperó su nombre anterior.
En 1922, la Mancomunidad de Cataluña, integrada por las cuatro diputaciones catalanas, cambió su nombre por Avenida de la Nacionalidad Catalana, hasta que, solo dos años después, Primo de Rivera le atribuyó el nombre del rey Alfonso XIII.
Con el nuevo cambio de Gobierno, de Alfonso XIII pasó a llamarse Avenida Catorce de Abril, en conmemoración del día de proclamación de la II República. Tras la caída de la república con la guerra civil, la avenida llevó el nombre Avenida del Generalísimo Francisco Franco, para, con la recuperación de la democracia, recibir el nombre que todos conocemos: Avenida Diagonal.
La Avenida Diagonal en nuestros días
Hoy en día, la Avenida Diagonal es un ejemplo de la diversidad de Barcelona. Con sus amplios bulevares, zonas ajardinadas y una mezcla de edificios históricos y modernos, la avenida es un punto de referencia tanto para locales como para turistas.
Con sus 11 km en total, es una arteria que conecta importantes zonas comerciales y residenciales, además de albergar sedes de empresas multinacionales, lo que refuerza su papel como motor económico de la ciudad.
También ha sido un escenario importante para eventos culturales y sociales. Desde manifestaciones políticas hasta festivales y desfiles, la avenida ha sido un espacio de expresión pública y celebración comunitaria.
Resultaría difícil imaginar Barcelona sin la Diagonal atravesándola desde el distrito de Les Cortes hasta el Parque del Fórum, pasando cerca de emblemáticos lugares como La Pedrera y la Sagrada Familia. La vida que bulle a ambos lados de la avenida, en toda su extensión, es un reflejo del dinamismo y de las infinitas posibilidades que ofrece la ciudad a residentes y visitantes.
No lejos de ella, cerca de la famosa Plaza Francesc Macià, encontramos dos restaurantes creados para sorprender a los paladares más exigentes: Iluzione, frente al Turó Park, e Iluzione Diagonal, al pie de la propia avenida. Ambos espacios nos sumergen en un ambiente exclusivo donde cada elemento está diseñado para contribuir a una experiencia gastronómica única.
Déjate sorprender, en uno u otro, por las creaciones del chef, una fusión perfecta de la gastronomía italiana y tradiciones culinarias de todos los rincones del mundo. Todo ello con el encanto de saber que te encuentras junto a la Diagonal, el corazón latente de una de las ciudades más vibrantes del mundo.
Iluzione:
Te esperamos en: C/ Ferrán Agulló, 18, 08021, Barcelona
Teléfono: (+34) 935 418 856
Iluzione Diagonal:
Te esperamos en: Av. Diagonal 570. 08021 – Barcelona
Teléfono: (+34) 613 012 610
